sábado, 28 de noviembre de 2015

Reforzamiento.



Reforzamiento.

 Aunque por lo general el reforzamiento se interpreta como “recompensa”, este término tiene un significado particular en psicología. Un reforzador es cualquier consecuencia que fortalece la conducta que le sigue. Así, por definición, las conductas reforzadas incrementan su frecuencia o duración. Siempre que vea que una conducta persiste o se incrementa con el paso del tiempo, podría suponer que las consecuencias de tal conducta son reforzantes para ese individuo (Landrum y Kauffman, 2006).


Refuerzo

Un refuerzo se define como un evento que, presentado inmediatamente después de la ocurrencia de una conducta, aumenta la probabilidad de ocurrencia de dicha conducta. Existen distintos tipos de refuerzos. Aquellas consecuencias que al ser presentadas aumentan la probabilidad de que ocurra una respuesta son refuerzos positivos;  En cambio, aquellas consecuencias que al ser retiradas de la situación aumentan la probabilidad de que la respuesta vuelva a ocurrir son llamadas refuerzos negativos. Estos refuerzos funcionan como un alivio; Los refuerzos, además, pueden clasificarse en primarios y secundarios. Los refuerzos primarios son aquellos que se relacionan con la satisfacción de necesidades biológicas, tales como comida o bebida. En cambio los refuerzos secundarios son aprendidos por asociación con los primarios, e incluyen el dinero, las calificaciones escolares o el elogio, por ejemplo (Papalia y Wendkos, 1987).


                  












Referencias.

Manual de Psicología Educacional / Violeta Arancibia C., Paulina Herrera P. y Katherine Strasser S. 

Wolfolk, anita (2010) Psicología educativa. 11a. edición. Editorial Pearson.

Papalia, Diane E. (1994). Psicología. Editorial McGraw-Hill.

Myers, David G. (2007). Psicología. Editorial Médica Panamericana.

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